Cada vez son más los bares, terrazas, discotecas, pubs y restaurantes que solicitan a nuestra empresa una medición de ruido en Valencia, a sabiendas de que sobrepasar el límite permitido por sus consistorios puede provocarles serios problemas judiciales y, en el peor de los casos, incluso la clausura del local comercial, como ha ocurrido ya en varias ocasiones en nuestro país ante demandas de vecinos que sufrían los excesos de ruido de este tipo de locales.
La ley actual ampara a que nadie tenga que soportar en su casa determinados decibelios que podemos medir en Acustic Control que provengan de terrazas de verano, bares que se encuentran en los pisos bajos o adyacentes o discotecas, un tipo de local este último donde sí están más concienciados de esta problemática, en parte porque sus empresarios son más proclives a ser demandados por exceso de ruido a altas horas de la madrugada.
El proceso judicial no es sencillo y, como casi cualquier otro en este país, nada rápido. Pero eso no quiere decir que al final no pueda producirse una sentencia condenatoria al empresario del local o establecimiento en forma de indemnización al afectado o incluso la clausura, independientemente de que tenga todos los permisos en regla por parte del ayuntamiento y las licencias requeridas por este último.
De hecho, son los propios consistorios los que ponen los límites y baremos en los que se pueden mover este tipo de establecimientos, así que lo mejor es hacer una medición de ruido en Valencia de forma periódica, para asegurarse de que no se sobrepasan los límites.